Las estafas continúan preocupando a los Bragadenses.
Stella Maris Prado, de 67 años, informó que el 1 de febrero ingresó a un anuncio promocional de Netflix desde su teléfono. Después de proporcionar sus datos y un código token, descubrió que su cuenta bancaria había sido hackeada, sufriendo pérdidas económicas.
Por otro lado, Enrique Alberto Miller, de 30 años, fue contactado vía WhatsApp el 8 de febrero por un amigo, quien le solicitó dinero mediante una transferencia. Sin saberlo, transfirió $37,500 a un CVU proporcionado. Mas tarde descubrió que el WhatsApp de su amigo había sido hackeado.
Ambos casos están siendo investigados por la UFI y Juzgado de Mercedes.